Siete trabajadores capturados en una planta de Proctor & Gamble (P&G) a las afueras de la ciudad turca de Estambul fueron rescatados después de una odisea de nueve horas, según funcionarios.
La policía en Gebza intervino después de que el sospechoso, aparentemente en protesta por la guerra en Gaza, fue al baño.
El gobernador local Seddar Yavuz dijo que los rehenes no habían sufrido lesiones.
Imágenes en línea mostraron al sospechoso, con el rostro oculto por un pañuelo palestino, vistiendo lo que parecía ser un chaleco explosivo y llevando un arma.
Fue detenido ileso después de la operación de rescate “meticulosa”, agregó el Sr. Yavuz.
El secuestrador ingresó a la planta alrededor de las 15:00 hora local (12:00 GMT), informa la agencia de noticias DHA. Los rehenes fueron liberados poco antes de la medianoche.
Los funcionarios dicen que el sospechoso quería llamar la atención sobre la situación en curso en Gaza.
Reportadamente, una bandera palestina fue pintada en la entrada del edificio con un letrero que decía “las puertas estarán abiertas para Gaza”.
Los oficiales de policía acordonaron el acceso a la fábrica y el personal médico fue enviado al lugar.
Los funcionarios dicen que está en marcha una investigación a gran escala sobre el incidente.
Imágenes del lugar durante el enfrentamiento mostraron a familiares de algunos rehenes agrupados en un cordón policial a cierta distancia de la planta.
İsmet Zihni, cuya esposa trabaja en la planta, dijo a DHA que ella le había enviado un mensaje diciendo que había sido tomada como rehén.
Sin embargo, agregó que no sabía “si era ella o alguien más”.
Los familiares de los rehenes expresaron frustración por la falta de información de las autoridades turcas o la policía.
“Hemos estado esperando seis horas sin que ningún funcionario haga una declaración”, dijo el padre de un rehén a AFP anteriormente.
En un comunicado, P&G dijo que estaba aliviada de que nadie resultara herido durante el incidente.
“Estamos agradecidos a las autoridades y los primeros respondedores que manejaron la situación con valentía y profesionalismo”, agregó la empresa.
También dijo que el sospechoso no era un empleado.