Soldados del ejército de Sudán han recapturado la sede del radiodifusor estatal en Omdurmán, la ciudad justo al otro lado del Nilo de la capital, Jartum, según informó el ejército.
Este es un avance simbólico para el ejército en su guerra civil de 11 meses con las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF).
Las RSF habían ocupado la sede desde poco después de que estallara la lucha.
El conflicto en Sudán ha llevado a ocho millones de personas a huir de sus hogares y hay advertencias de creciente hambre.
Videos compartidos en redes sociales muestran a soldados celebrando fuera del radiodifusor estatal en Omdurmán.
En un comunicado, el ejército lo calificó como una “gran victoria”.
Pero a pesar de tomar el edificio en abril pasado, las RSF no pudieron transmitir desde allí y la televisión estatal continuó mostrando contenido pro- ejército, transmitido desde otro lugar del país.
Desde que estalló la guerra, el ejército y las RSF han luchado por el control de Jartum y las ciudades cercanas. A pesar del llamado del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas a un alto el fuego durante el mes sagrado de Ramadán, los intensos combates han continuado en varias partes de la capital.
“La gente está muy rejuvenecida – hay mucho sentimiento ligado a la radio nacional”, dice Mohanad Hashim de la BBC, quien trabajó anteriormente para el radiodifusor estatal de Sudán.
“También es una gran derrota para las RSF porque estaban utilizando la sede de la radio como su bastión. Las Fuerzas Armadas Sudanesas van a exprimir esto – es una gran victoria para ellos”.
El conflicto estalló en abril pasado tras un desacuerdo entre el jefe del ejército, el General Abdel Fattah al-Burhan, y el jefe de las RSF, Mohamed Hamdan Dagalo, más conocido como Hemedti, sobre un plan político respaldado internacionalmente para avanzar hacia un gobierno civil.
Además de desplazar a millones, el conflicto ha dejado a Jartum en ruinas, causado una crisis humanitaria y desencadenado asesinatos étnicamente impulsados en Darfur, en el oeste del país.
Varios intentos internacionales de negociar un alto el fuego han fracasado.
Información adicional por Natasha Booty y Damian Zane
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