El 24 de febrero, la planta de acero rusa dañada por un posible ataque con drones es “una empresa militar” que contribuye directamente al arsenal de Moscú, afirmó Andrii Yusov, portavoz de la inteligencia militar de Ucrania, en una transmisión televisiva.
Un incendio estalló en la planta principal de Novolipetsk Steel (NLMK) en Lipetsk, Rusia, el 24 de febrero. Fuentes de inteligencia militar informaron supuestamente a los medios ucranianos que la planta fue objetivo de una operación conjunta realizada por el Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) y la agencia de inteligencia militar de Ucrania (HUR).
Yusov ni confirmó ni negó la implicación del SBU o HUR en sus comentarios sobre el ataque.
“No lo confirmaremos ni lo negaremos. Pero había una instalación de producción rusa que está directamente involucrada en el complejo militar-industrial, dirigiendo el acero a la producción de armas, armaduras y armas misilísticas que matan ucranianos”, dijo Yusov.
Situada aproximadamente a 400 kilómetros de la frontera entre Rusia y Ucrania, la planta representa el 80% de la producción de acero de NLMK y contribuye con el 18% a la producción total de acero de Rusia.
Yusov llamó a la planta “una empresa militar”.
“(P)odemos confirmar el hecho de que sí, esta empresa estará fuera de servicio por mucho tiempo”, dijo.
La inteligencia militar de Ucrania ha reclamado públicamente la responsabilidad de ataques de sabotaje en territorio ruso en ocasiones anteriores.
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