Científico chino que compartió secuencia de Covid protesta por cierre de laboratorio.

Un conocido científico chino que desafió una orden de silencio del gobierno chino al ser el primero en revelar el genoma del virus Covid en una base de datos global hace cuatro años protagonizó una rara protesta esta semana en Shanghai después de ser expulsado de su laboratorio.

El científico, Zhang Yongzhen, había dirigido un laboratorio en Shanghai desde 2018, pero descubrió durante el fin de semana que las instalaciones habían sido selladas con un colega suyo encerrado dentro, según un medio de comunicación chino. La tarjeta clave del Dr. Zhang había sido cancelada y los ascensores se encontraban apagados.

El domingo por la noche, comenzó a dormir al aire libre sobre cartones aplanados frente a puertas azules cerradas en la entrada del laboratorio, según fotos publicadas en línea por estudiantes. En una de las fotos se podían ver al menos cinco guardias de seguridad.

Otro medio de comunicación, la página web de una agencia de medios estatales en la provincia de Shandong, informó el lunes sobre la protesta del Dr. Zhang y lo citó diciendo entonces que “todavía estoy esperando que se resuelva el problema, pero nadie ha venido a resolverlo”.

Los relatos de la odisea del Dr. Zhang generaron un fuerte repudio en las redes sociales chinas, con miles de personas publicando comentarios sobre el informe de los medios de Shandong. Muchos de ellos criticaron al gobierno de Shanghai y a su centro de salud público, propietario del laboratorio, por haber expulsado al científico prominente.

El miércoles por la mañana temprano, el Dr. Zhang anunció en una publicación en su cuenta de redes sociales que su equipo había sido autorizado a reanudar las investigaciones en el laboratorio. Agradeció a sus estudiantes y a las personas que le habían brindado apoyo en línea, y dijo que se estaban llevando a cabo discusiones para resolver una disputa en curso sobre el pago por trabajos anteriores y su continuación en el empleo.

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No estaba claro de inmediato si la disputa del Dr. Zhang con el Centro Clínico de Salud Pública de Shanghai era una represalia oficial por su papel en revelar el genoma del virus Covid al mundo a principios de enero de 2020. En ese momento, el gobierno chino estaba silenciando a médicos y otros que intentaban alertar sobre el misterioso virus detectado en la ciudad central de Wuhan. Los científicos estaban bajo presión para no publicar información al respecto sin permiso.

Otros científicos chinos también habían secuenciado el virus en ese entonces, pero el gobierno chino prohibió a los investigadores el 3 de enero de 2020 divulgar detalles sobre una nueva neumonía que había comenzado a circular en Wuhan. El Dr. Zhang obtuvo el virus en líquido pulmonar de un paciente en el Hospital Central de Wuhan ese mismo día, y poco después subió su genoma a una base de datos alojada por los Institutos Nacionales de Salud de EE. UU.

Pasaron días sin que la información se hiciera pública, ya que los administradores de la base de datos tenían la política de revisar nuevos genomas antes de publicarlos. Por lo tanto, el Dr. Zhang dio permiso a un virólogo australiano, Edward C. Holmes, para publicarlo el 10 de enero en un foro para virólogos, donde rápidamente atrajo la atención internacional.

Las autoridades cerraron rápidamente el laboratorio del Dr. Zhang después de que este revelara el genoma del virus, pero posteriormente permitieron que volviera a abrir.

El gobierno de Shanghai no hizo comentarios de inmediato el miércoles sobre el acceso del Dr. Zhang a su laboratorio. Southern Weekend, un medio de comunicación chino controlado por el estado, citó a un funcionario del centro de salud público de Shanghai que dijo el lunes por la noche que el contrato del centro con el Dr. Zhang había sido terminado en octubre de 2022.

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Según una descripción publicada por un grupo de personas que se identificaron como miembros de su equipo de investigación, el Dr. Zhang afirmó que él y su equipo aún no habían recibido más de $1 millón por parte del Centro de Salud Pública de Shanghai en virtud de un contrato anterior. La cuenta también describió al Dr. Zhang como alguien que se opuso a los planes de las autoridades para trasladar rápidamente el laboratorio y sus muestras de patógenos a otro edificio con un laboratorio que no había sido certificado al mismo nivel de seguridad biológica.

Algunos relatos de su protesta fuera del laboratorio también habían desaparecido de Internet el miércoles por la mañana, aparentemente eliminados por censores gubernamentales.